Una aparentemente perfecta familia se muda a un vecindario en los suburbios, pero en cuanto a la verdad de por qué viven ahí, ellos no son muy transparentes con sus vecinos.
Some families are too good to be true.Algunas familias son demasiado buenas para ser ciertas
They're not just living the American dream, they're selling it.Ellos no solamente están viviendo el sueño americano, ellos lo están vendiendo
Can you keep up?¿Puedes mantenerte a su nivel?
La película The Joneses (Derrick Borte, 2010), narra la historia de una familia que se muda a un nuevo vecindario. Su sofisticación, estilo y clase llama inmediatamente la atención de sus vecinos y cada uno de los integrantes de esta familia es un ejemplo de lo que representa el sueño americano. Sin embargo, no todo es lo que parece (es Hollywood, por supuesto) y detrás de esta fachada de perfección y felicidad se esconde una organización de mercadeo que contrata a personas para que representen familias y vendan diferentes productos a través de su exposición en entornos sociales. Por ejemplo, el empleado que representa al padre (David Duchovny) es un excelente jugador de golf por lo que recomienda el uso de sus palos e indumentaria. Quien representa a la madre (Demi Moore), lo hace a través de mostrarse como una inmejorable ama de casa, que además es un ejemplo de belleza y compostura. Los hijos interpretados por Ben Hollingsworth y Amber Heard se convierten inmediatamente en los más populares de la escuela e imponen tendencias y modas además de tener los últimos artefactos tecnológicos. Los vecinos los ven con admiración (y por supuesto envidia) e inmediatamente adquieren los productos que los Joneses usan para pretender estar al mismo nivel que ellos ostentan. En resumen, la película es una agridulce sátira del capitalismo, el sueño americano y los pocos escrúpulos de las grandes compañías para captar cada vez más consumidores. Como lo expresa uno de los personajes de la película: "if people want you they want what you got" (Si las personas te quieren, querrán lo que tienes). Para el caso de este artículo, se vinculará este aspecto de la cinta con el concepto del efecto 'Ripple'.
El título de la película nace de la expresión 'Keeping up with the Joneses' (algo así como manteniendo el nivel con los Joneses) que hace referencia a la comparación con los vecinos como ejemplo de éxito social y económico. El fallar al mantener el nivel con los Joneses es percibido como una demostración de inferioridad cultural o socio-económica. Respecto a la película es claro que Los Joneses se constituyen en una atracción y referencia en cuanto llegan al vecindario. Su estilo y armonía los hace un arquetipo de lo que debe ser una familia americana. Como en cualquier empresa, un supervisor (en este caso supervisora, encarnada por Lauren Hutton), audita los resultados de sus empleados, en este caso los Joneses, y evalúa como se incrementan las ventas como resultado indirecto de querer imitar y mantenerse al nivel de cada uno de los integrantes de esta particular familia.
El efecto 'Ripple' hace referencia a tres situaciones:
- La primera situación se da cuando un efecto indirecto se expande de la fuente hasta alcanzar áreas que no eran las iniciamente planeadas. En este caso, la película expone como el simple hecho de mostrar ciertos bienes materiales y servicios por parte de los Joneses, genera el efecto indirecto de incrementar el consumo de dichos bienes y servicios, y por ende, las ventas para las compañías que los ofrecen. Ellos no venden directamente los productos a sus vecinos; simplemente esperan que la imagen que ellos proyectan como familia armoniosa, sea un incentivo para que los vecinos les imiten y adquieran los mismos productos que ellos usan.
- El segundo caso define una situación donde al igual que una onda que se expande a través de la superficie del agua cuando un objeto es arrojado en ella, el efecto del estado inicial que sigue es incremental. En otras palabras se generan ondas cada vez más grandes.
Un ejemplo de esto es el análisis económico del efecto Ripple. Con la reciente crisis económica las personas gastan menos dinero. Una familia cualquiera decide ahorrar costos no viajando en vacaciones, lo que implica no comprar tiquetes aéreos ni realizar reservas hoteleras. Las aerolíneas y hoteles deben entonces recortar gastos para mantener a flote sus empresas. Estos recortes pueden incluir despido de empleados. Los empleados despedidos deben a su vez reducir sus gastos para adaptarse a esta nueva situación en espera de conseguir un nuevo trabajo. De manera sucesiva, el efecto "ripple" en el contexto económico, va generando ondas incrementales que terminan por impactar de manera generalizada a la economía. Lo interesante del caso es que las personas, familias y empresas afectadas tienen una relación indirecta entre sí, es decir, ninguna empresa o familia afecta a otra de manera directa y mucho menos deliberada. Es simplemente, el efecto "Ripple" que va creciendo a medida que las familias y empresas van reduciendo su consumo y gastos respectivamente.
Otro tema sobre el que el efecto 'Ripple' puede ser aplicado a las ciencias sociales, es el análisis que puede hacerse es el del concepto de celebridad. Es claro que no es lo mismo imponer una tendencia que genere ondas de comportamiento en una sociedad, si esta tendencia es generada por un desconocido a si es impulsada por una persona célebre. En un artículo de Taleja, el autor realiza un análisis del impacto que tienen las celebridades en el posicionamiento de marca. En primera instancia celebridad es entendida como aquellas personas que gozan de cierto reconocimiento público tales como actores, deportistas, cantantes y políticos. Taleja concluye estableciendo que las celebridades tienen un impacto positivo en el posicionamiento de marca y establece catorce criterios a la hora de seleccionar la celebridad adecuada para promocionar un producto.
No es casual que las empresas paguen millones a las celebridades para dar a conocer sus productos, así como retiran su apoyo a las celebridades caídas en desgracia que pueden afectar la imagen de su empresa. Las empresas de consumo masivo saben que una celebridad bien seleccionada tiene la capacidad de generar un efecto 'Ripple' que incremente sustancialmente sus ventas, justificando la contratación de dichas celebridades.