domingo, 22 de septiembre de 2013

Películas Disruptivas: Jurassic Park (1993)



Este post contiene 'spoilers'. 

Disruptivo(a): Que produce ruptura brusca.

Las películas disruptivas son la clase de películas pioneras o impulsoras de tendencias que una vez estrenadas, aportan algo innovador o dan un impulso renovado a una tendencia existente en la industria fílmica. Adicionalmente, generan un serie de emuladores en el mejor de los casos y copias marginales en su gran mayoría.

Con un presupuesto de 63 millones de dólares, Parque Jurásico o Jurassic Park recaudó en todo el mundo 1 billón de dólares, situándose actualmente en la décimo tercera posición como la película más taquillera de la historia; recientemente, se estrenó su versión en 3D, lo que sigue incrementando su recaudación. A nivel crítico, conserva un 93% acumulado en Rotten Tomatoes y no es atrevido afirmar que revolucionó el uso de los efectos especiales por computador en el cine.


A 20 años de su estreno, es diciente su capacidad de generar aún emociones en la audiencia e invitarnos a participar de una vertiginosa aventura. 

Impacto para los participantes de la película


 


Es indudable que Steven Spielberg es uno de los directores (si no el) más influyente de los últimos 40 años. No solamente sus películas se cuentan entre las más taquilleras de la historia, sino que con algunos tropiezos, conserva una abrumadora consistencia en la calidad de sus cintas. Es incluso diciente que constantemente a los directores jóvenes que empiezan a destacarse con una película prometedora, inmediatamente se les etiquete como el nuevo Spielberg.



 



Es muy difícil añadir algo más a las disertaciones, estudios y análisis que se han hecho sobre la obra de este director de origen judío. Basta decir que para bien o para mal, cambió la concepción de cine como espectáculo de masas y junto a George Lucas, moldearon el cine de finales del siglo XX, generando una impronta que aún se mantiene. 



Su meteórico ascenso inició en 1975 con Tiburón, empezando a despuntar las constantes de su cine para posteriormente hacer suya la década de los ochenta, no solamente ejerciendo de director, sino tutelando como productor a una importante camada de jóvenes directores que se identificaban con los planteamientos y maneras del pionero Spielberg.


  



Sin embargo, no siempre el reconocimiento crítico fue equivalente al clamor del público, lo que hizo evidente en algunos casos sus forzados intentos por lograr el apoyo de la industria (léase la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas - Oscar). Es legendario el batacazo que sufrió el Color Púrpura en la gala de los Oscar de 1986, siendo nominada en 11 categorías para tener que irse con las manos vacías. 





Quizás de manera injusta, Spielberg era percibido simplemente como un "entretenedor". Por esa razón, sus intentos por hacer cine 'serio' eran recibidos con recelo y escepticismo. Esto cambio con la realización de una película muy íntima y personal para el director: La Lista de Schindler (1993). No solamente consolidó el respeto del publico cuya percepción mayoritaria hasta entonces era la de un director solamente capaz de brindar un competente espectáculo, sino que recibió por fin el ansiado reconocimiento de sus pares en la Academia. Spielberg recibió el primero de sus hasta ahora dos premios Oscar como mejor director y la película recibió otros seis premios en diferentes categorías. 



Es asombrosa la capacidad de Spielberg para permanecer vigente en una industria influenciada por los constantes cambios tecnológicos y que ha debido adaptarse a transiciones dinámicas en su modelo de negocio. Quizás se deba a su encomiable capacidad para mantener el equilibrio entre el clasicismo en su estructura y el estar al corriente con las últimas innovaciones tecnológicas aplicadas al séptimo arte. 


En el apartado de actores es notable la constante de Spielberg de muy pocas veces acudir a estrellas de cine. Con esto quiero decir que el director prefiere contar con actores y actrices confiables en su capacidad interpretativa, pero no necesariamente con reconocimiento global. Excepciones hechas serían Tom Cruise (Minority Report, 2002; War of the Worlds, 2005), Leonardo Di Caprio (Catch Me If You Can, 2002) y Julia Roberts (Hook, 1991). 

En ese sentido, Jeff Goldblum, Sam Neill, Laura Dern y Richard Attenborough, se han caracterizado por tener notables carreras interpretativas, pero no necesariamente se han convertido en estrellas internacionales. Después de su participación en Jurassick Park han estado vinculados en diferentes películas, pero no de la magnitud en términos de taquilla de esta. Son sólidos actores de carácter pero definitivamente no super estrellas de Hollywood. Quizás Goldblum con Independence Day logró cierto reconocimiento a nivel mundial, aunque este fuera efímero. En cuanto a los niños actores, tanto Ariana Richards como Joseph Mazzello no han tenido una destacada carrera en la industria y han tenido participaciones menores en películas ídem.

Un efecto indirecto del éxito de la película es el relacionado con Michael Crichton. Si bien anteriormente algunas de sus novelas habían sido adaptadas al cine con respetable notoriedad, es innegable que el avasallador éxito de Jurassic Park incrementó exponencialmente la presencia de sus libros llevados a la gran pantalla. Congo (Frank Marshall, 1995), Disclosure (Barry Levinson, 1994) y Timeline (Richard Donner, 2003), son prueba de ello.




¿Por qué es una película disruptiva?


Efectos especiales: Si bien ya se habían usado efectos especiales usando la tecnología computarizada una dédaca atrás, es innegable que Spielberg incorporó dichos efectos en la historia de una manera orgánica, haciendo que la esencia de la película no fueran los efectos en sí mismos, sino un medio para potenciar una historia de aventuras y emociones fuertes.


Precisamente fue una película producida por Spielberg (dirigida por Barry Levinson), una de las primeras en usar CGI (Computer Generated Imagery). El Jóven Sherlock Holmes tiene una escena mas o menos extensa que utilizó esta tecnología y le valió un premio Oscar a mejores efectos especiales.


Otro de los grandes hitos en el uso de CGI para el cine está representado por Terminator 2 de James Cameron. Los efectos especiales con los que se incorpora el personaje del T1000 fueron completamente innovadores y solo por eso, esta cinta merecería también considerarse como una película disruptiva. 


Hasta la llegada de Parque Jurásico, la manera como se mostraba a los dinosaurios en el cine utilizaba principalmente la técnica de stop motion.

Uno de los máximos exponentes de esta técnica fue Ray Harryhausen, quien lo llevó al máximo de sus posibilidades en la cinta Clash of the Titans de 1981, especialmente en la escena en la que desencadenan al Kraken.


Por supuesto, el CGI representó un salto gigantesco en el campo de los efectos especiales y generó una nueva veta de oportunidades para el cine, particularmente para los géneros de fantasía, ciencia ficción y recientemente en el subgénero del cine de superhéroes (aunque podría argumentarse que ya se convirtió en un género por derecho propio).




El argumento: en este apartado es importante hacer una claridad: la película no se caracteriza precisamente por plantear nuevas herramientas narrativas o innovar con giros argumentales. La fuerza de su historia está precisamente en que sabe lo que es (una película de aventuras y suspenso) y se fortalece exprimiendo todas las potencialidades del género. Además el humor a lo largo de la cinta es dosificado de tal manera que no desplaza el enfoque central de la película, pero tampoco permite que nos tomemos demasiado en serio lo que vemos. 


Esta película es una digna representante de la ficción científica especulativa, en la medida en que toma elementos plausibles de temas científicos y en torno a ellos, elabora un argumento verosímil que no necesariamente realista.



La banda sonora: para John Williams, la banda sonora de Jurassic Park es otra muestra de su superlativo talento. Este legendario compositor ha sido constante en las películas de Spielberg y ambos se han beneficiado de esta colaboración mutua en la que han logrado una simbiosis de música e imágenes que quedarán no solamente en los análes de la historia del cine, sino en los recuerdos de varias generaciones de cinéfilos.




Emuladores, clones y sosías:


En esta sección es necesario hacer dos distinciones temáticas definidas y al mismo tiempo entrelazadas: el argumento y los efectos especiales. En el primer apartado, argumentalmente un aceptable emulador de la película que nos ocupa es Jumanji (Joe Johnston, 1995). Johnston como alumno aventajado de Spielberg, retoma las temáticas de Parque Jurásico como por ejemplo la conformación a la fuerza de una familia atípica que debe unirse para hacer frente a una amenaza externa. En ambas películas lo salvaje y exótico es símbolo de peligro y dichos peligros se desencadenan por el deseo de los protagonistas de jugar con fuego. 



En cuanto a los efectos, definitivamente está película es muy inferior a la de los dinosaurios y en algunos casos son risibles los personajes generados por computador que se incorporan en el argumento.



Caso contrario es el de la siguiente película y genera un poco de ambivalencia el determinar si entra en la categoría de clones o sosías. Si bien Godzilla (Roland Emmerich, 1998) es técnicamente sobresaliente y está apenas un punto por debajo de Jurassic Park, es en el apartado argumental donde se descarrila completamente y queda como una pálida copia (siendo generosos) de la película de Spielberg. Además es clara la intención de Emmerich por querer emular a Spielberg como lo muestra el teaser trailer del museo en el que incluso menosprecia socarronamente a Parque Jurásico.




Es muy evidente que varías de las escenas están "inspiradas" en Jurassic Park y muy probablemente, varios renglones argumentales de esta película serían muy diferentes de no estar antecedidos por la cinta de Spielberg.

En la categoría de Sosías, desafortunadamente hay más cintas de las razonablemente deseables y algunas merecen la etiqueta de lo que se ha denominado como CGI PORN, es decir, aquellas películas en donde el afán de saturar en la pantalla la mayor cantidad posible de efectos especiales, va en total detrimento de la historia. 




Es cierto que algunas de estas películas son de Serie B, pero esto tampoco puede ser utilizado como excusa para plagiar descaradamente los elementos exitosos de Jurassic Park y fallar miserablemente en el intento.


lunes, 9 de septiembre de 2013

El tiempo como catalizador de la recepción del cine en la sociedad: los clásicos, los rimbombantes, los rezagados y los adelantados.

Cada año se estrenan cientos de películas. Algunas notables, otras mediocres y generalmente bodríos. Lo cierto es que existe una interacción tal entre el espectador y la película visonada, que esta relación define la manera como una cinta resuena en la sociedad. Se marcan tendencias, se adoptan estilos e incluso el cine es capaz de modificar el lenguaje de las personas. De esta manera, el tiempo es un elemento clave en la manera como la sociedad percibe y acepta una película. Desde películas que son simples modas pasajeras a cintas que son aceptadas en su estreno y continúan siendo significativas para las generaciones venideras. Utilizando este criterio acá va una propuesta de clasificación:


En casos excepcionales, se puede hablar de clásicos instantáneos. Películas que conectan inmediatamente con la gran mayoría de crítica y público. Cintas que de manera atemporal mantienen e incluso mejoran su calidad y aceptación con el paso del tiempo. Cada vez que se observa una película de estas características, se van encontrando nuevas capas de análisis y mensajes que funcionan en varios niveles.



Otras películas captan el Zeitgeist  (espíritu de la época) y son éxitosas en el momento en el que son estrenadas, pero el inexorable paso del tiempo es implacable y, al pasar los años, su mensaje es caduco o los valores técnicos llegan a ser risibles. No quiere esto decir que no tengan mérito, pero lo cierto es que pasado el tiempo quizás su impacto en el público fue exagerado o tal vez,  no resisten un análisis más riguroso sin que trasluscan sus puntos flojos. Estas serían las películas rimbombantes.


File:A Beautiful Mind Poster.jpg


Otra categoría es la de las películas rezagadas. Son aquellas cintas de calidad estimable empero transmiten un mensaje que para el espectador ha pérdido relevancia, y quizás, si se hubieran exhibido unos años antes, hubieran calado en la audiencia y mejorado sustancialmente su recepción. Puede ser porque los actores ya no tienen la misma capacidad de atracción que antes o el director sigue empeñado en repetir las temáticas que le hicieron exitoso en películas anteriores. Lo cierto es que su fracaso no obedece necesariamente a la calidad de la película, tanto como a la disparidad entre el momento de su estreno y el estado de las cosas imperante en la sociedad en ese momento.



File:Elizabethtown poster.jpg


Finalmente, están las películas adelantadas a su época. Hay un dicho que expresa que el tiempo pone las cosas en su sitio; creo que esta descripción encaja perfectamente con este tipo de películas. Cuántas veces hemos sido testigos de películas que al momento de estrenarse han sido injustamente maltratadas por la crítica e ignoradas por el público. Sin embargo, al pasar los años su mensaje empieza a permear la conciencia pública y a ser reivindicado por la crítica especializada. Podría asociarse este tipo de películas a la etiqueta de 'películas de culto'. Sin embargo, no necesariamente una película adelantada a su época se convierte en una cinta de culto que despierte fervientes seguidores. Basta con que se reivindique su mensaje y se revalúen sus merecimientos.



 

 
El tiempo es en definitva el parámetro que determina el aporte que tendrá una película en la sociedad. Es un juez paciente pero certero; afinado pero no absoluto. Probablemente nunca habrá consenso en cuanto a la calidad de una película, incluso si pasan decenas de años. Sin embargo, aquellas cintas que logran sobresalir con el paso del tiempo, las que logran que su mensaje resuene en las diferentes culturas, son las que influyen realmente en el devenir social y contribuyen significativamente al séptimo arte.